Riku está loco por HARU, un popular actor de doblaje de edad desconocida que no quiere mostrar su rostro. Nunca se pierde sus transmisiones en vivo, adora las mascotas de los personajes que interpreta y puede hablar durante horas sobre el anime en el que aparece. Un día, un estudiante de intercambio llega a su clase. Es guapo, pero tiene un carácter solitario que despierta la curiosidad de Riku por alguna razón.