⋆˚ʚɞ Traducción / Corrección: Makku
—¿Podría la enfermedad que mencioné estar relacionada con los síntomas de mi padre?
—Sí. Debo verificarlo, pero definitivamente existe esa posibilidad. Pero, ¿quién fue el médico que te informó? Esta enfermedad era desconocida hasta que el artículo se publicó recientemente por primera vez en la República de Fransoienne. Hay menos de veinte médicos en el imperio, incluido yo, que están al tanto.
¿Una enfermedad difícil de la que menos de veinte personas en el imperio sabían?
El príncipe heredero frunció el ceño y dijo:
—No fue ningún gran médico. La persona que me habló de esta enfermedad es—
Fue entonces cuando el emperador lo interrumpió con una sonrisa.
—¿Qué importa quién se lo dijo a quién? Ve e investiga diligentemente para curarme esta enfermedad.
El vizconde Van sintió una leve sospecha ante lo que parecía un intento del emperador por ocultar algo, pero inclinó la cabeza.
—¡Sí, Su Majestad! ¡Espere un poco, por favor!
Después de regresar a su laboratorio, Van inclinó la cabeza, confundido.
¿Por qué ocultó su identidad? Alguien que sabe sobre la existencia de esta enfermedad debe ser un experto en el campo, alguien que conoce no solo el conocimiento médico del imperio, sino incluso los avances más recientes de la República. Serían de gran ayuda para los tratamientos de Su Majestad en el futuro.
Pensó mientras sacaba el informe de la República: No hay muchos médicos en la capital de ese nivel, así que debe ser uno de los que conozco.
Una lista de posibles candidatos vino a su mente. En primer lugar, los médicos del Hospital Imperial Cross, donde él era el administrador principal. Los mejores médicos del imperio estaban reunidos allí, así que era posible.
No, hemos tenido varias reuniones sobre los síntomas de Su Majestad, pero nadie ha mencionado esta enfermedad. Entonces, ¿podría ser un médico del Hospital Rosedale?
El Hospital Rosedale era un hospital de élite que atendía a la nobleza.
Pero rápidamente negó con la cabeza. No, solo les importa el dinero. Ninguno de esos médicos tiene un verdadero interés en la medicina.
Los últimos candidatos potenciales vinieron a su mente. Más bien… hay algunos médicos en la Clínica Teresa.
La Clínica Teresa era un hospital establecido por la Casa Clarence con el propósito de brindar ayuda a los pobres, por lo que la calidad de su personal médico era inferior a la de otros hospitales. Pero quizás, debido a que atendían a tantos pacientes, ocasionalmente había médicos excepcionales.
Estoy seguro de que el administrador principal Gott conoce esta enfermedad, y ese joven genio Graham que conocí brevemente probablemente también lo sabe. Tendré que mencionar el tema casualmente y verificarlo más tarde.
Van era muy consciente de sus propias habilidades. La diabetes seguía siendo una enfermedad relativamente desconocida, y sería difícil tratar al emperador por su cuenta.
Por lo tanto, antes de comenzar el tratamiento del emperador, quería consultar al médico que había diagnosticado diabetes solo con escuchar los síntomas.
Seguro que es un maestro de considerable habilidad. ¿Quién podría ser?
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—Parece que el vizconde Van ha encontrado una pista.
—Sí, es un verdadero alivio. Espero que su enfermedad pueda curarse esta vez, padre.
—Estoy de acuerdo.
El padre y el hijo imperial continuaron su conversación.
—Pero, por la reacción del vizconde Van, parece que lo que dijo Elise es cierto.
—Sí.
—¿Una enfermedad que solo se publicó recientemente en Fransoienne? ¿Cómo supo ella algo así? —murmuró el emperador para sí mismo, fascinado.
—Padre.
—¿Qué ocurre?
—¿Por qué le ocultó al vizconde Van que fue Lady Elise quien mencionó esa enfermedad?
El emperador Minchester dijo:
—Ella será la princesa heredera, así que no hay necesidad de que se involucre con el mundo médico, ¿verdad? Ya es tentador hacer que regrese del hospital de inmediato.
El emperador quería que Elise se convirtiera en la princesa heredera, no en una doctora. Ser médico no se ajusta a la princesa heredera que se convertirá en emperatriz.
La medicina no era una mala profesión. No, incluso el emperador sabía que era una profesión valiosa, digna de respeto.
Sin embargo, la joven que sería princesa heredera no podía convertirse en doctora.
—¿Qué opinas?
—¿A qué se refiere, padre?
—Sobre el matrimonio con Elise.
—Simplemente sigo sus órdenes.
—¿Es así? Seguro que tienes algún sentimiento al respecto. ¿Qué tal?
Pero el príncipe heredero solo respondió sin emoción:
—Soy un miembro de la familia imperial. Creo que mis sentimientos personales son irrelevantes.
El emperador Minchester negó con la cabeza ante eso.
Es tan rígido.
Su hijo, Linden de Romanov, era un príncipe heredero más capaz que cualquiera, pero era frío, como si sus emociones se hubieran secado. Estaba muy consciente de los sentimientos que su hijo llevaba en su corazón, por lo que le parecía una lástima. ¿Llegaría el día en que ese corazón frío se calentaría?
Minchester cambió de tema.
—De todos modos, ¿cómo avanza la Guerra de Crimea?
—El segundo cuerpo avanza hacia la península de Crimea. Se espera que lleguen en unos días.
—¿Y el Reino de Monchel, del que Elise habló antes?
El príncipe heredero bajó la voz.
—En realidad, tengo un informe que hacer sobre Monchel.
—¿Qué ocurre?
—Me han informado que un enviado no oficial de Fransoienne ha estado visitando Monchel recientemente.
El rostro del emperador se endureció.
—¿Es eso cierto?
—Sí, esta información ha sido verificada por nuestra agencia de inteligencia.
—Ah, entonces, tal como ella dijo, hay una alta probabilidad de que Monchel se una a la guerra.
—Sí. Después de que el enviado se fue, recibí un informe de que Monchel ha comenzado a moverse en secreto. Es probable que nos ataquen por la espalda en un momento crucial.
—Haa… —el emperador suspiró—. Odio pensar en lo que podría haber pasado si no lo hubiéramos sabido. Yo… no, nuestro imperio le debe agradecimiento a Elise.
Quedó impresionado por Elise una vez más. Si no hubiera sido por su consejo, las tropas imperiales habrían sido apuñaladas por la espalda, desprevenidas, después de entrar en la península. No, no solo apuñaladas. Habría sido un golpe fatal que les rompiera la columna y los decapitara.
Realmente increíble.
El emperador recordó la última vez que vio a Elise. La madurez que mostró, habiendo abandonado por completo sus formas inmaduras del pasado. Y su sabia perspicacia, su corazón amable.
Siempre la había cuidado como si fuera su propia sobrina, pero ese día la favoreció hasta el punto de la codicia.
Debo hacer que se convierta en la princesa heredera y asegurarme de que abandone el hospital rápidamente.
Después de eso, el emperador y el príncipe heredero imperial conversaron sobre varios asuntos políticos relacionados con el imperio.
El emperador se recostó en su silla y dijo:
—Linden.
—Sí, padre.
—¿Cuándo será tu próxima salida secreta?
—Estaba pensando en irme pronto.
Las salidas secretas: una tradición y deber ancestral de aquellos que gobiernan el imperio, en los que se disfrazaban para ocultar su estatus y observar la vida de sus ciudadanos.
—¿A dónde planeas ir esta vez?
—Estaba pensando en ir a Heran Road.
Heran Road era donde vivía la burguesía, la nueva clase que había surgido después de la caída del feudalismo, tras el auge de la industrialización.
Pero el emperador negó con la cabeza.
—¿Qué tal si vas a la División Pierre en su lugar?
—¿La División Pierre?
La División Pierre era un área donde se reunían principalmente ciudadanos pobres.
—Entiendo. Lo haré. ¿Hay alguna razón en particular?
—La Clínica Teresa está ubicada allí, ¿no? —El emperador sonrió—. No ha habido noticias… Ve y comprueba por ti mismo si Elise está bien.
⊱ ──────ஓ๑♡๑ஓ ────── ⊰
Elise comenzó a seguir al barón Graham Fellon para ser educada como su aprendiz formal. Por supuesto, podría haberse llamado educación, pero Graham no le enseñaba cada pequeño detalle. Técnicamente, ella estaba observando. Lo seguía como una sombra y lo veía tratar a los pacientes.
Graham ocasionalmente la miraba, como si recordara que estaba allí, y le lanzaba una pregunta.
—¿Sabes de qué sufre este paciente?
Elise respondió en un tono respetuoso, como si hablara con un maestro.
—Esto es neumonía bacteriana.
—¿Por qué dices eso? ¿No dirías que sus pulmones están llenos de agua?
—Considerando el esputo purulento y la esclerosis observada en el examen, es más probable que sea neumonía y no que los pulmones se llenen de agua.
Una respuesta perfecta.
Una vez que terminaba el breve intercambio, Graham la ignoraba nuevamente y se concentraba en el tratamiento. Elise observaba en silencio desde atrás.
Siento que soy una estudiante de medicina de nuevo, pensó para sí misma.
Cuando asistía a la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Seúl, solía seguir así a los profesores durante sus prácticas clínicas. En ese entonces, estaba muy nerviosa por conocer pacientes por primera vez y a menudo se sorprendía…
No pudo evitar sonreír levemente ante los recuerdos.
Quiero obtener mi licencia médica rápidamente para poder hacer mis propios diagnósticos.
Era agradable poder observar así, pero realmente quería tratar pacientes ella misma y realizar cirugías.
Estoy segura de que tendré una oportunidad.
Por otro lado, su maestro, Graham, estaba ocupado estando silenciosamente sorprendido. ¿Quién diablos es esta chica?
Aunque parecía desinteresado, la observaba de cerca. ¿Cómo es capaz de esto?
Al principio, comenzó con preguntas sobre conocimiento médico. No eran preguntas fáciles. Requerían un conocimiento exacto de las circunstancias relevantes para responder. Sin embargo, ella respondió todo correctamente, como si lo hubiera leído en un libro de texto.
Así que aumenté la dificultad y comencé a hacer preguntas sobre el diagnóstico de los pacientes, pero…
Los resultados fueron aún más impactantes.
Ella respondió basándose en lo que escuchó sobre los síntomas de los pacientes desde detrás de él, pero sus deducciones eran exactas, como si fuera una doctora experimentada.
Respondió preguntas sobre enfermedades que él deliberaba rápidamente, e incluso cuando sus respuestas diferían, después de revisar los resultados de diagnóstico, el diagnóstico de la chica era correcto.
¿Cómo es capaz de esto? Estaba lleno de confusión. ¿Ha tratado pacientes antes?
Pero no había forma de que una niña pequeña tuviera experiencia tratando pacientes.
O… quizás es una genio?
A veces, aparecían seres así en el mundo: genios sin igual, más allá de los límites de la edad y la experiencia.
El Gran Alquimista Flemming era así, al igual que el Conde Graham, quien había establecido una nueva base para la ciencia médica hace ochenta años.
No lo sé. Realmente no lo sé. ¿Es esta chica una genio como ellos?
Graham dejó escapar un suspiro.
Su suposición sesgada de que una joven noble había venido al hospital por curiosidad había desaparecido hace mucho tiempo. Simplemente estaba desconcertado por esta chica que no tenía sentido.
—Um, ¿doctor? ¿Qué debo hacer ahora? —preguntó Elise después del tratamiento.
—No hay nada más planeado para hoy. Vete a casa.
—Sí, gracias por hoy. Nos vemos mañana.
Se despidió y se dio la vuelta.
—Espera, Rosé.
—¿Sí?
Pero Graham dudó durante mucho tiempo en lugar de continuar de inmediato.
—¿Doctor?
Justo cuando Elise puso una cara perpleja, él dijo con voz tímida:
—He estado queriendo disculparme.
—¿Eh?
—Fui prejuicioso y pensé en ti como una molestia todo este tiempo.
Se sintió agitada por la inesperada disculpa.
—N-no es así, doctor.
—No, hice suposiciones equivocadas basadas en tu apariencia. Lo siento.
A diferencia de su primera impresión, ella no era una joven noble egoísta. Más bien…
Recordó lo que había hecho por los vagabundos. Prácticamente eran ignorados, incluso en la Clínica Teresa. ¿Podría algún médico en el mundo haber hecho lo que ella hizo por un grupo de vagabundos?
—De todos modos, intentemos llevarnos bien de ahora en adelante.
Ella sonrió ante la sinceridad que sintió en su disculpa.
—Sí, doctor. Trabajaré duro, así que cuídeme, por favor.
Graham se aclaró la garganta como si estuviera avergonzado.
—Ven mañana al puesto de socorro en lugar de a la clínica.
Los ojos de Elise se abrieron.
—¿El puesto de socorro?
—Sí.
Un puesto de socorro era como una sala de emergencias en términos modernos de la Tierra, donde se trataban pacientes con trauma y casos de emergencia. En otras palabras, era un lugar donde se reunían los enfermos críticos.
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