La primera vez que Lu Jingyan vio a Sheng Xian fue en un bar. Al quedarse sin señal en su teléfono, le pidió prestado su Wi-Fi y le preguntó la contraseña. Sheng Xian le respondió sin rodeos: “Tu cumpleaños”.
Convencido de que ese detalle era una muestra de interés, Jingyan empezó a perseguirlo, a veces en secreto y otras de forma descarada.
Sin embargo, medio año después, descubre por accidente que la contraseña del Wi-Fi de Sheng Xian… no tenía absolutamente nada que ver con él.